Los niños: revista de educación y recreo
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Los niños: revista de educación y recreo
El año 2021 que acaba de concluir fue declarado por los Estados miembros de las Naciones Unidas, Año Internacional para la Eliminación del Trabajo Infantil. La lucha contra la Covid 19 ha oscurecido el foco en el combate contra este gravísimo problema, que priva de su derecho a la educación a parte de la infancia mundial.
La Biblioteca de la Universidad Pontificia Comillas en su deseo de contribuir a visibilizar este problema ha seleccionado una revista pionera en España en su dedicación a la infancia: Los Niños: revista de educación y recreo, publicada y dirigida por Carlos Frontaura, entre 1870 y 1877.
Los niños, si bien no es la primera revista infantil -el conocido impresor Antonio de Sancha publicó La Gazeta de los niños a finales del siglo XVIII-, sí destaca entre las numerosas publicaciones periódicas dedicadas a la infancia durante el siglo XIX.
El primer ejemplar ve la luz en marzo de 1870, inevitablemente influenciado por la Revolución de septiembre de 1868. La Gloriosa, había sido el primer intento de establecer en España un régimen político democrático y moderno y aspiraba a traer la ansiada prosperidad a la nación. Tras su fracaso, algunos de sus deseos los asumirá la restauración alfosina. Probablemente el más destacado es la educación popular: contar con un pueblo formado, que sepa ser libre; un país de buenos ciudadanos que puedan contribuir al bien común. Aspiración que se difundirá también a través de la novela, el teatro, los periódicos y las revistas.
En la introducción del primer tomo de la revista Los niños, vemos cómo se comparten estos nobles deseos: “Comenzamos la difícil empresa en que nos empeña nuestro deseo de ser útiles á la patria… Palabras escritas por su editor y director Carlos Frontaura Vázquez (1834-1910), literato, periodista notable, fundador de periódicos, y político liberal que seguirá , el modelo de la conocida Magasin d'education et recreation. Revista publicada en París por el escritor Julio Verne, el editor Pierre-Jules Hetzel y el pedagogo Jean Macé. Interesada en la educación cívica y que atraía a sus lectores con las novelas de Verne y los dibujos de conocidos ilustradores como Edouard Riou, Jules Férat, George Roux o Leon Benett.
Frontaura conquistará el favor del público dotando a su publicación de un aspecto distinguido, utilizando un papel de calidad, letra grande y una cabecera con encanto. Cuidando los contenidos con textos amenos y contando con la colaboración de escritores famosos como: Juan Eugenio de Hartzenbuch, Modesto Lafuente, Gertrudis Gómez de Avellaneda, Ramón Campoamor o el editor francés Pierre-Jules Hetzel, bajo el pseudónimo J.-P. Stahl, entre otros. Para las ilustraciones elige profesionales de talla como los dibujantes Francisco Ortego y Tomás Padró o los xilógrafos Tomás Carlos Capuz y José Severini.
Además del beneplácito del público nacional, recibe el reconocimiento internacional a través del premio de la Exposición Universal de Viena (1873), centrada en esa ocasión en la temática “Cultura y Educación”.
Los niños se publica en Madrid hasta 1877 y, en 1883, Carlos Frontaura pasará la revista a Barcelona, cesando en 1886. En la ciudad condal será editada por la Librería de Juan y Antonio Bastinos, con el subtítulo revista quincenal de educación y recreo, continuando con sus excelentes grabados, buena parte obra de Julián Bastinos.
Como su modelo, la francesa Magasin d'education et recreation, comparte además de la estética ya comentada, el deseo de formar a las generaciones futuras, haciendo especial hincapié en ir más allá de partidismos: “esta Revista no tiene ninguna tendencia política oculta ó aparente. Tratamos solo de ayudar á los padres en la educación de sus hijos, para que éstos, cualquiera que sea el sistema de gobierno de su país, lleguen á ser hombres de honor, de saber y de virtud.”
Martínez Arancón (2005), tras analizar los tres primeros años de la revista indica cómo Frontaura desarrolla un programa de formación cívica a través del fomento de ideas como:
-La consideración de España como la patria común en la que debe imperar la convivencia pacífica regida por la tolerancia.
-La defensa de la necesidad de una ciudadanía debidamente formada regida por valores como el esfuerzo, la laboriosidad, la generosidad y el cuidado de la familia en contraposición con una clase de políticos que sólo buscan el beneficio propio. En la cuestión social, los pobres y la educación de las niñas, se aprecia que Los niños sigue visiones propias de su tiempo. La revista plantea la educación de las niñas con el principal objetivo de lograr buenas amas de casa que hagan frente a la tarea de educar a los hijos. Lograr mujeres abnegadas y compresivas, “el descanso del guerrero”, que aún en las situaciones más penosas, sean capaces de perdonar a sus maridos.
El ejemplar que exponemos perteneció precisamente a una niña, Mari Asun, que nos dejó su huella a través de anotaciones manuscritas en la contracubierta del T. 8 (jul.-dic. 1873):
"Sera [sic] una Rosa sera [sic] un Clabel [sic] en el mes de Mayo telodire [sic] Ola [sic] , La tia [sic] que mas [sic] me quiere es la tia [sic] María,
Mari Asun
El ejemplar presenta además deterioro físico consecuencia de manipulaciones incorrectas, como desgarros, deformaciones y manchas. Agresiones que cabe pensar que se deben al uso infantil.
Inexorablemente “la huella del tiempo”, como bien indica el título de esta exposición, va alterando los materiales documentales al modificarse sus estructuras químicas, a estos cambios pueden sumarse alteraciones como el calor, la humedad, los contaminantes, las plagas, la manipulación o los desastres que pueden dejarles “malheridos” o aún peor, hacerlos desaparecer.
Es un reto, para los profesionales de la Biblioteconomía y la documentación en general, cumplir las recomendaciones para el almacenamiento y conservación a largo plazo de los materiales pero, sin duda, lo es también apreciar la información potencial que el paso del tiempo les ha dejado y que puede ser de gran interés para los investigadores. La exposición Malheridos: la huella del tiempo nos habla de ello y nos anima a sumergirnos en sus heridas. En nuestro caso la que nos dejó una niña, Mari Asun.
BIBLIOGRAFÍA
Chivelet, María. La prensa infantil en España: desde el siglo XVIII hasta nuestros días. Madrid: Fundación SM, 2009
Martínez Arancón, Ana. “Ciudadanos del mañana: la revista Los niños y la educación cívica” en Historia de la Educación Vol.24 (2005), pp.291-308
Ossorio y Bernard, Manuel. Ensayo de un catálogo de periodistas españoles del siglo XIX.--Madrid : [s.n.], 1903 (Imp. José Palacios)